Cada vez más personas optan por esta inversión frente a las baja rentabilidad de los instrumentos tradicionales

En el actual escenario de incertidumbre mundial producto de la pandemia del Covid, con volatilidad en el dólar y bajas tasas de interés, tener el dinero en un banco e invertir en los instrumentos financieros tradicionales parece no ser la mejor decisión.

Si lo que se busca es rentabilizar un capital y al mismo tiempo incrementar el patrimonio familiar, la adquisición de una propiedad se ha convertido en una tendencia en Chile desde hace varios años. En ese contexto, invertir en una parcela aparece como una de las decisiones más certeras.

Pero no se trata de comprar un terreno en cualquier lugar. Uno de los aspectos más importantes de considerar al analizar la compra de una parcela es su ubicación, ya que de ello dependerá en gran parte la plusvalía y la rentabilidad que esta inversión pueda generar.

La ubicación de la parcela no da lo mismo

Desde el punto de vista de la inversión, no da lo mismo elegir una parcela en una zona apartada, pero sin carreteras cercanas que la conecten, que optar por la tranquilidad de un lugar con buena conectividad.

En el caso Foresta de Zapallar, su acceso está ubicado a corta distancia de la Ruta 5 Norte, específicamente de la rotonda de acceso a la localidad de Catapilco. Esta carretera tiene un alto estándar y permite trasladarse desde allí a Santiago en aproximadamente 90 minutos, lo que le otorga condiciones inmejorables de conectividad, sin alterar la tranquilidad y el entorno natural donde se encuentra inserto el condominio.

Otro factor clave al momento de evaluar la inversión en una parcela es la comuna en la cual se ubica. En este caso Zapallar tiene una alta demanda inmobiliaria de segunda vivienda, lo que sumado a los factores mencionados antes, garantiza una alta plusvalía y una buena rentabilidad.

Inversión inmobiliaria conveniente

Hoy en día comprar una parcela de agrado ofrece una serie de beneficios. En los no monetarios está la posibilidad de disponer de un espacio muy grande, sin tener que pagar valores elevados por gastos comunes y teniendo la posibilidad de hacer habilitaciones y mejoras progresivas en el lugar, sin la presión de un plazo determinado. Es común que antes de la construcción de la vivienda principal, las familias que invierten en una parcela construyan primero zonas de recreación y encuentro, como un quincho y una piscina. Estas posibilidades no las ofrece ningún otro tipo de inversión inmobiliaria.

Desde otro punto de vista, invertir en una parcela hoy es más rentable que tener ese capital en un banco, considerando las bajísimas tasas de interés que se ofrecen. Además no se requiere un capital elevado como ocurre en la adquisición de otro tipo de propiedades y parte del monto total de la parcela se puede financiar mediante un crédito hipotecario o -en el caso de Foresta de Zapallar- con un crédito directo de hasta 11 años plazo, el cual no aparece en el sistema financiero, evitando así utilizar la capacidad de endeudamiento.